La llegada de un bebé te cambia la vida. Por eso hay cosas que debes saber si eres un papá primerizo para que no te aterres o te traumes en las primeras de cambio.
Muchos son los que creen que a las mamás es a la que le cambia la vida por completo. Pero lo cierto es que a los papás también.
Incluso la vida de pareja también lo hace. Por lo que hay que estar preparados.
Tu estilo de vida cambia
Este aspecto es lo primero que debes tener claro. La rutina que estabas acostumbrado a tener, el salir cada fin de semana, llegar siempre tarde de la oficina o porque te fuiste a jugar una partida de fútbol o de baloncesto con tus amigos ya no podrás hacerlo cada vez que quieras.
La llegada del bebé demanda mucha atención y es tu deber como papá ayudar a la madre en todo el proceso. De lo contrario será muy difícil para ella.
Ya no podrás dormir noches enteras, deberás despertar cada tres horas para que ayudes con el tetero o biberón. También cambiar pañales. Cuidar el bebé por algunas horas mientras tu pareja descansa un poco.
Esta rutina es difícil para los padres primerizos, pero deberás acostumbrarte.
Siempre consulta con el pediatra
Cuando somos padres por primera vez no sabemos nada y eso no es un pecado.
Cualquier cambio que veas con tu hijo, una subida de temperatura, alguna erupción que veas en su cuerpo. Incluso si llora mucho, no duerme o duerme en exceso (los recién nacidos siempre duermen) consulta con el pediatra.
Todas las dudas que tengas con el bebé llama o escríbele a tu pediatra. Si te pones a buscar en Google o escuchar todo lo que tienen que decir las abuelitas o los vecinos puede ser peor, ya que los temores serán mucho mayores.
Por eso lo mejor es ir a los expertos y estos son los pediatras.
No tienes que comprar todo lo que ves
Siempre pasa que con la llegada del bebé queremos comprar todo lo que vemos. Sobre todo los aparatos tecnológicos que supuestamente llevan a que tu bebé esté más seguro.
Antes de que dejes todos tus ahorros y lleves al límite todas tus tarjetas de crédito alto ahí. Nada de eso es necesario.
¿Qué debes comprar?
Lo esencial para el bebé: una cuna, corral, un coche, los teteros y algunos accesorios más.
Por supuesto ropa y pañales, muchos pañales.
Olvídate un poco de dispositivos electrónicos como cámaras, medidores de pulso y todas esas cosas que pueden haber en la tienda, que lejos de llenarte de tranquilidad lo que hará es sumar más ansiedad en ti y la necesidad de revisar los dispositivos para ver que todo esté bien.
Sabemos que como papá primerizo quieres asegurar por completo a tu hijo, pero no hay que exagerar.
Duerme cuando el bebé lo haga
Es muy importante que tanto tú como la mamá duerman y descansen para que puedas sobrevivir al cuidado del bebé.
Sabemos que hay que cocinar, acomodar la casa. Pero por lo menor durante el primer mes eso deberá quedar a un lado.
A menos que tengas la ayuda de las abuelas y los tíos, pueden ayudarte con eso.
Pero si viven solos y las demás personas están ocupadas debes entender que el bebé es la máxima prioridad. También lo es que descanses y debes hacerlo.
Cuando el bebé esté durmiendo, aprovecha y hazlo también.
Incrementa la seguridad alrededor del bebé
Cuando llega el bebé, la seguridad debe incrementarse.
Lo primero es que tenga un seguro médico para que cualquier emergencia de salud pueda estar cubierta y estés tranquilo.
Pero también hay que tomar en cuenta aspectos más simples como el hecho de lavarse las manos cada vez que vayas a tomarlo, ya que no tiene tantos anticuerpos que los protejan de las bacterias.
No puedes dejarlo solo ni un segundo. Sobre todo cuando lo vas a bañar. Si algo se te olvida, lo cargas y llevas: si lo dejas solo puede ocurrir un accidente.